Capitulo 134

Hola chicas ¿Como estan? Yo estoy feliz por que hoy es el segundo aniversario del blog y les traigo una pequeña sopresa les tengo preparado un pequeño maraton asi que disfrutenlo ok y para este capitulo una cancion de Reik "FUI"

Vi el anillo de compromiso que Brandon me había dado ¡¿Qué es lo que estaba haciendo? Estaba a punto de engañar al hombre de mi vida, todo por dejarme llevar por el deseo  reprimido que sentía, ¿Cómo fue que llegue a este momento? ¿Cómo fue que llegue a quedar desnuda con Joe encima de mi? Lo aleje de mi drásticamente, mientras me besaba el cuello, me levante de la cama y comencé a buscar mi ropa desesperadamente, el me miro sorprendido desde la cama, con las manos temblorosas devolví la ropa interior a mi cuerpo a su lugar, Joe se quedo mirándome unos instantes.

Joe: ¿Qué ocurre Mía? –cuestiono mirándome desde la cama yo lo ignore

Se deslizaron varias lagrimas por mis mejillas, evite mirarlo a toda costa mientras me vestía, se levanto y fue hacia donde yo estaba completamente vestida, dándole la espalda, sus manos se posaron en mis brazos

Yo: no me toques –dije furiosa-. Este era tu plan ¿Cierto? Seducirme hasta llegar a esto, esta era tu arma de seducción, me contaste todas esas mentiras para que bajara la guardia

El me miro sorprendido y devolvió los boxers a su lugar, lo miraba con rabia me había utilizado, solo me había engañado para seducirme

Joe: Mía yo no tengo ningún plan, todo se dio así

En ese momento me sentí agredida era mas que obvio como había planeado que las cosas terminaran, en mi momento de enojo le solté una bofetada, en ese mismo instante me arrepenti de haber golpeado tan bello rostro, no solo el había sido el culpable, mantuvo la calma, me tomo por la cintura y me aprisiono contra el, con su rostro a centímetros del mío, trate de liberarme de su agarre pero no lo logre.

Yo: déjame ir

Joe: no lo voy a hacer hasta que me escuches, todo lo que dije antes fue cierto no lo hice para que bajaras la guardia y así lograr seducirte, me aleje de ti por que tu papá me obligo a hacerlo, ¿Cómo puedes creer que yo te deje por voluntad propia? Tú eres mi razón para vivir, tienes que creerme Mía, por favor.

Yo: mientes, mi papá no pudo hacer eso, el no hubiera permitido jamas que yo sufriera, el también sufrió al ver como lloraba por ti, todos los días se lamento de todo lo que me estaba pasando

Joe: entonces se merece un oscar

Yo: ¿Cómo puedes decir eso?

Joe: Mía solo ponte a pensar lo que hizo para separarnos antes, no me ofreció dinero, un deportivo y un lujoso departamento con tal de que me alejara de ti, pero como eso no funciono tuvo que buscar otra forma de hacerlo, tu estado era muy delicado, el doctor dijo que necesitarías un medicamento carísimo para poder salvarte yo no tenia el dinero para comprarlo –se deslizaron las lagrimas por mis mejillas, no lo habría notado si Joseph no hubiera acariciado mi rostro para secarlas-. Trate de conseguirlo, pero me fue imposible, hubiera vendido mi alma al diablo con tal de mantenerte conmigo –lo mire a los ojos no parecía que estuviera mintiendo, tomo aire y continuo-. Entonces Charlie me dijo que el liquidaría la cuenta del hospital y pagaría el importe del medicamento, pero con la condición de que me alejara de ti para siempre, mi desesperación por mantenerte con vida era tan grande que accedí a irme sin darte ninguna explicación, creí que era lo mejor para los dos, pero me di cuenta de que no puedo vivir sin ti, te necesito a mi lado, TE AMO Mía, te amo y nunca deje de hacerlo, por favor tienes que creerme.

No sabia si confiar en el o no por una parte tenia razón, mi padre nos había intentado separar antes, pero me costaba trabajo aceptar que se hubiera aprovechado de mi situación para presionar a Joseph de que tomara una decisión equivocada, mis ojos derramaban lagrimas Joseph acariciaba mi rostro, me miraba intensamente de la forma en que lo hacia antes, pero tenia un rayo de esperanza de que confiara en lo que el me había dicho minutos antes, no podía quedarme ahí, tome las manos de Joe y las aleje de mi rostro, el me miro de una forma que nunca lo olvidare, el sabia perfecto que todo cambiaria a partir de ese momento, yo también lo sabia, sabia que esa conversación cambiaria las cosas, pero no tenia idea a favor de quien se inclinaría la balanza, me di media vuelta y comencé a caminar.

El resto de la noche evite a toda costa encontrarme con Joseph, mi cabeza estaba hecha un nudo, las palabras de Joe sonaban en mi mente y martillaban mi cabeza.

Cuando la hora de mi salida llego, me fui corriendo a casa llevando conmigo todavía puesto el uniforme, ya que no quería regresar y encontrarme con Joe en los vestidores, también evitando encontrarme con Emma y ella comenzara a cuestionarme ¿Cómo había sido mi primera guardia nocturna?

Llegue a casa a las 7:00am aproximadamente abrí cuidadosamente la puerta y entre, todo estaba apagado, lo que me indico que Brandon continuaba durmiendo, fui hasta la habitación y ahí estaba el durmiendo tranquilamente, me acerque a la cama, lo mire, bese sus labios y acaricie su rostro tiernamente, de inmediato un sentimiento de culpa se apodero de mi, ¿Cómo había sido capaz de dejarme llevar por el deseo que sentía por Joe? Brandon era un hombre excepcional y no se merecía lo que le había hecho, no tenia explicación, me había dejado llevar por el deseo que sentía en aquel momento, todavía sentía las candentes caricias de Joe sobre mi cuerpo, sus labios besando los míos, su barba ligeramente crecida raspando mi piel. Salí de mis pensamientos cuando Brandon beso mis labios

Brandon: buenos días hermosa ¿Cómo fue tu primera guardia nocturna?

Yo: bien… ¿tu como dormiste?

Brandon: mmm… bien… pero me di cuenta de que esta cama es muy grande para una sola persona, es enorme cuando no estas tu –llevo sus labios a mi cuello-. Hueles raro

Yo: ¿Yo?

Brandon: si, no es tu aroma, parece como si estuviera mezclado con otro… -llevo su nariz a mi cuello otra vez-. Es raro

Yo: claro que no, es tu imaginación, o mas bien es el sudor fue una noche algo agitada –agregue nerviosa-. ¿A que hora entras?

Brandon: a las 10:00am –respondió besando mi cuello-. Tenemos algo de tiempo doctora Montgomery

Me tomo por la cintura y ágilmente coloco mi espalda en la cama, beso mis labios y mi cuello apasionadamente, desabrocho mi blusa y mi sostén salio a relucir, beso mis labios y acaricio mi rostro que estaba un poco húmedo, se dio cuenta y separo su rostro del mio, me miro confundido.

Brandon: ¿Qué ocurre Mía?

Yo: nada

Brandon: si no quieres hacerlo, esta bien, entiendo que debes estar agotada, podemos dejarlo para otro dia

Yo: no, estoy bien, quiero hacerlo –tome su rostro y lo bese-. Quiero que me hagas el amor, quiero estar contigo

Me miro sorprendido y beso mis labios con pasión, beso mi cuello y fue quitándome lentamente la ropa, un gemido gutural se escapo de mi boca cuando entro en mi, el jadeo y comenzó a moverse a un ritmo variable, mi corazón latió a un ritmo acelerado.

No podía dudar de lo que sentía por el, era el hombre de mi vida, me amaba me lo demostraba cada dia, con cada detalle, con cada caricia, me aferre a ale enterrando mis dedos en su espalda, bese sus labios y el susurro algo en mi oído.

Brandon: Te amo Mía… Te amo

Sonreí y cerré los ojos, me sostuve con fuerza de el cuando alcance el climas, abrí los ojos lentamente mi corazón dio un vuelco, cuando vi que Joseph era el que había dicho esas palabras, eso no era cierto ese era Brandon, mi Brandon, Joseph estaba muy lejos de ahí, simplemente no podía ser el.

Brandon: ¿Qué ocurre Amylee?

Yo: nada ¿Por qué?

Brandon: te dije te amo

Yo: yo también te amo Bran, te amo

Brandon: me había asustado por que te habías quedado en silencio, me tengo que ir o llegare tarde al hospital

Deposito un dulce beso en mis labios y se metió al baño, a los pocos minutos salio, se vistió y fue rumbo al hospital, me quede desnuda en la cama, después de que el se fue, prepare la tina para tomar un largo baño, necesitaba aclarar mis pensamientos, tener bien claro que es lo que quería, me metí a la burbujeante tina.

Mi cuerpo se relajo al momento que entro en contacto con el agua caliente, pero mi mente se colapso, imágenes del momento del ataque que recibí con Joe me invadieron, recordé el dolor que sentí cuando la bala perforo mi piel, los gritos desesperados de Joe solicitando ayuda, su voz quebrada cuando iba al hospital, el momento en que lo vi por ultima vez, recordé vagamente las palabras que me había dicho.

Yo: Joe… -dije en un susurro de voz

Joe: hola princesa

Yo: te… amo –logre decir con dificultad

Joe: yo también te amo, princesa –vi como sus lágrimas se deslizaron por sus mejillas Yo: ¿Por qué lloras? ¿Qué ocurre Joe? ¿Esta todo bien?

Joe: si princesa, todo esta bien, te recuperaras muy pronto ya lo veras

Yo: quiero ir a casa –la falta de aire me hizo toser 

Joe: tranquila Mía, muy pronto iras a casa, todo va a estar bien ok

Enfermera: joven por favor

Joe: si ya escuche…Mía escucha –cerré los ojos y asentí con la cabeza- Me tengo que ir nena, pero nunca olvides que te amo ok, tienes que ser muy fuerte pase lo que pase, prométeme que no importa lo que pase no vas a cometer ninguna locura, y que vas a ser feliz, me lo prometes –asentí nuevamente con la cabeza

Yo: te lo prometo… te amo Joseph

Joe: yo también pequeña, no se te olvide que es una promesa he! –negué con la cabeza-Ahora tienes que descansar –asentí moviendo la cabeza y volví a cerrar los ojos, respire profundamente y mi cuerpo se relajo

Esa fue la ultima vez que lo vi, esa fue su despedida , se veía triste, destruido, como si le arrancaran parte de su vida, tiempo después desperté y me dijeron que se había marchado.

En ese momento resonaron las palabras de Joe en mi mente, “Tu padre me obligo a dejarte” tenia que comprobarlo, así que Salí de la tina me coloque la bata y fui a la sala, tome el teléfono y maque el numero de la casa de papá y Liz, el me contesto segundos después.

Papá: ¿Diga?

Yo: hola papá soy yo –dije tratando de que el nudo en mi garganta se disolviera

Papá: hola princesa, que sorpresa, me has alegrado el dia, te he marcado muchas veces pero no me contestas, me imagino que estas muy ocupada trabajando

Yo: pues si… creo que eso lo sabes mejor que yo

Papá: si, lo se como olvidar mis años de residente, ¿Cómo esta Brandon?

Yo: el esta bien, te manda saludos

Papá: justamente el otro dia le estaba diciendo a Liz que seria buena idea que se vinieran a pasar un fin de semana con nosotros

Mis ojos se llenaron de lágrimas y en mi garganta se formo un enorme nudo

Yo: papá

Papá: ¿Qué pasa Mía?

Yo: Joe volvió –solté sin precaución, el se quedo en silencio